Queridos amigos de Keren Hayesod,
Hoy es un día increíblemente especial para el Estado de Israel y para Keren Hayesod, ya que estamos conmemorando el Yom HaAliá (Día de la Inmigración), una celebración israelí a través de la cual rendimos homenaje a aquellos que han hecho aliá y también una oportunidad para analizar y reconocer la importancia de la inmigración judía y su impacto en el Estado de Israel.
Desde el establecimiento del Estado de Israel, Keren Hayesod junto a la Agencia Judía para Israel y el Gobierno de Israel, ha ayudado a más de tres millones de judíos a emigrar a nuestro país. El futuro de Israel depende de la continuación de la aliá. Traer a todo judío, de cualquier parte del mundo, es una prioridad nacional. El creciente antisemitismo ha provocado un incremento en los pedidos de aliá, razón por la cual continuamos expandiendo nuestra infraestructura global a fin de satisfacer las necesidades crecientes.
Según un informe publicado recientemente por el Ministerio de Aliá y Absorción y la Agencia Judía para Israel, la inmigración a Israel aumentó en un 31% en 2021, siendo que llegaron al país 20.360 nuevos inmigrantes hasta la fecha, en comparación con los 15.598 que lo hicieron durante el mismo período el año pasado.
Solo el año pasado y gracias a vuestro apoyo, Keren Hayesod jugó un papel preponderante en el traslado a Israel de unos 2.000 judíos de Etiopía, como parte de la Operación “Tzur Israel”.
La semana pasada dimos la bienvenida a más de 110 olim (inmigrantes) provenientes de Ucrania. La mayoría del vuelo estaba integrado por jóvenes menores de 35 años. Muchos de estos nuevos inmigrantes participan en programas especiales apoyados por Keren Hayesod y dirigidos exclusivamente a esta faja etaria. Estos programas incluyen Sela, Naalé y Masá. Además, algunos de los nuevos olim participarán en marcos de absorción como Ulpán Etzion y “Un Primer Hogar en la Patria”.
Sam Grundwerg, Presidente Mundial de Keren Hayesod, los acompañó durante este vuelo especial. Durante una ceremonia realizada antes de emprender el viaje se dirigió a ellos, diciendo lo siguiente: “Debemos siempre recordar y nunca olvidar lo bendecidos y privilegiados que somos de poder vivir en estos días y de ser testigos y a la vez representar la continuidad de lo que realizaron las generaciones que vivenciaron el establecimiento del moderno Estado de Israel. Este privilegio es a la vez un llamado a asumir la responsabilidad sagrada de asegurar este sueño”. Sam hizo aliá a Israel desde los Estados Unidos de América cuando era aún un adolescente, hace casi treinta años atrás.
Para los nuevos inmigrantes, hacer esta transición de su país de origen a una nueva vida en Israel, puede significar un serio desafío. Keren Hayesod se enorgullece de apoyar iniciativas y programas que ayudan en el proceso de absorción y nos place ser partícipes de la creación de su nuevo hogar aquí en nuestro país.
El proceso de mudarse a otro país y tener que conducirse en el marco de una nueva vida en un país extranjero es increíblemente difícil. Los inmigrantes deben encontrar una vivienda, trabajo, aprender un nuevo idioma además de adaptarse a los procesos administrativos y procesales. Tienen que ayudar a sus hijos a integrarse a un desconocido entorno educativo y social, mientras que ellos mismos deben aprender a desenvolverse en un país con una cultura diferente.
Para algunos, hay decisiones diarias que deben tomar tan simples como decidir qué quiosco de falafel o supermercado visitar con regularidad. Para otros, es más complejo decidir qué kipá (yarmelke) usar debajo de la jupá (dosel de la boda), el día que contraen matrimonio.
La semana pasada, Josh Aronson, un nuevo inmigrante llegado desde el Reino Unido y miembro de la familia global de Keren Hayesod, contrajo matrimonio en Jerusalén con su ya actual querida esposa. Antes de la ceremonia, Josh tuvo que tomar la decisión de qué kipá usaría el día de su boda. Se debatió entre una blanca o negra, ¿quizás con el logo de su equipo de fútbol favorito, el Manchester United? Finalmente su elección fue muy clara: Josh lució debajo de la jupá una kipá con el logo de los 100 años de Keren Hayesod.
