Keren Hayesod ha apoyado a la población de Israel durante 100 años. Nuestra historia es la historia del Estado de Israel y del Pueblo Judío. ¡Únase a nosotros para ser parte de los próximos 100 años de la historia de Israel!
Nuestra Historia
Una historia compartida por el Pueblo Judío y el Estado de Israel
Keren Hayesod se estableció en Londres en el verano de 1920, para proporcionar al Movimiento Sionista los recursos necesarios que posibiliten el regreso de los judíos a Eretz Israel, conforme lo establecido por la Declaración Balfour en 1917, una declaración que convirtió el antiguo sueño de regresar a Tzion en un objetivo políticamente factible. En poco tiempo, Keren Hayesod creó organizaciones de recaudación de fondos en todo el mundo, comenzando principalmente por Europa Occidental y Central. Participaron en este emprendimiento figuras destacadas de todo el espectro político, como Jaim Weizmann y Zeev Jabotinsky. Se formaron equipos que viajaron a diversos países para establecer las oficinas de Keren Hayesod e informar a las comunidades judías sobre los objetivos de la nueva organización y conseguir su apoyo. En 1921, por ejemplo, en el marco de Keren Hayesod, Jaim Weizmann y Albert Einstein fueron a los Estados Unidos a fin de recaudar fondos para la fundación de la Universidad Hebrea de Jerusalén. En 1925, la universidad ya era una realidad. En 1921, Keren Hayesod ayudó a fundar el Banco Hapoalim y comenzó a realizar proyectos físicos en la Eretz Israel, comenzando, en 1927, con el Beit Haam (La Casa del Pueblo), en la localidad de Ramat Yishai (en la Baja Galilea). En 1926, Keren Hayesod trasladó su sede de Londres a Jerusalén. Con el establecimiento de la Agencia Judía para Israel en 1929, Keren Hayesod se convirtió en su brazo recaudador de fondos a la vez que continuaba con el desarrollo de sus propias actividades en una amplia gama de sectores.
Keren Hayesod Manifesto – 1920
“La llave de Eretz Israel está ahora en nuestras manos y debemos hacer un gran esfuerzo para asegurarnos de que a través de estas puertas, que se abrirán ampliamente, ingrese el mayor número posible de judíos, se establezca y se integre en el país. Necesitamos proveernos de los medios para esta gran obra y debemos comenzar hoy”.
Los efectos de la depresión económica mundial de 1929 repercutieron enormemente en Keren Hayesod, pero la recuperación fue acompañada por un giro dramático en los acontecimientos relacionados con la difícil situación de los judíos alemanes, debido al ascenso de Adolf Hitler al poder en 1933. Keren Hayesod jugó un papel preponderante en el desarrollo de un plan para traer a los judíos alemanes a Eretz Israel, incluyendo el establecimiento y desarrollo de localidades ubicadas en los suburbios de la Bahía de Haifa. Como parte de este emprendimiento, la Compañía de Asentamiento Rural y Suburbano (Rasco) fue fundada en 1934. Al mismo tiempo, Keren Hayesod continuó apoyando el establecimiento de una variedad de instituciones culturales, entre ellas, la que es hoy conocida como la Orquesta Filarmónica de Israel (1936). A fines de la década de 1930, los judíos estadounidenses se separaron de Keren Hayesod para establecer su propia organización de recaudación de fondos. Desde entonces, Keren Hayesod continúa recaudando fondos en el resto del mundo.
“Los méritos y logros de Keren Hayesod están grabados en el suelo de la patria y atesorados en el alma de la nación”.
Durante la Segunda Guerra Mundial y los años siguientes, Keren Hayesod lanzó campañas de emergencia, a veces en asociación con otras entidades. Destinados inicialmente para ayudar a los esfuerzos de guerra de los aliados, los fondos se utilizaron después de la liberación de los campos de concentración para costear los gastos de la inmigración a Eretz Israel, que debió ser ilegal en gran parte, desafiando las restricciones impuestas por el gobierno británico. Muchos de los líderes de Keren Hayesod murieron durante el Holocausto. La institución tuvo que reorganizarse rápidamente para hacer frente a las tremendas necesidades que surgieron durante esos fatídicos años. El destacado papel de Keren Hayesod en la empresa sionista lo convirtió en uno de los objetivos del terrorismo. En marzo de 1948, un coche bomba fue detonado en el patio del edificio donde estaban las oficinas de Keren Hayesod, en Jerusalén, matando a doce personas, incluido el Director General, Leib Yaffe.
“Yo creo que fue una de las manifestaciones más importantes, sino la más importante, de la voluntad nacional judía y de la capacidad para emprender una acción independiente, el hecho de que logramos la creación de un fondo nacional judío (Keren Hayesod) para la construcción de nuestro país”.
La primera década completa que siguió al nacimiento del Estado de Israel, estuvo caracterizada por las enormes olas de inmigración, principalmente del norte de África, Yemen, Kurdistán e Irak. En unos pocos años la población del país se triplicó, lo que provocó una mayor demanda por servicios sociales, educativos y culturales. Keren Hayesod redobló sus esfuerzos ayudando a establecer decenas de poblados urbanos, como Sderot en 1951 y Eilat en 1956, así como decenas de kibutzim y moshavim. Keren Hayesod aportó importantes fondos para estas comunidades, gracias a los recursos obtenidos a través de las nuevas campañas de recaudación de fondos proclamadas en todo el mundo y renovando su presencia en Alemania (1955). El destacado papel asumido por Keren Hayesod en la reconstrucción del país, indujo a la Kneset, el Parlamento de Israel, a sancionar la Ley Keren Hayesod en 1956, otorgándole el estatus de ser la única organización oficial de recaudación de fondos para el Estado de Israel en todo el mundo, excepto en los EE.UU.
“En verdad, Keren Hayesod fue un fondo israelí antes de que existiera Israel. El Estado de Israel no se habría creado si no fuera por Keren Hayesod, sin su modo de construir el país, sin los medios que invirtió aquí – si no fuera por este instrumento a través del cual las masas judías fueron partícipes en sentar las bases de la sociedad judía”.
La profunda recesión económica de la primera mitad de esta década produjo grandes problemáticas sociales que Keren Hayesod se esforzó por solucionar. Además, la organización lanzó una Campaña de Emergencia para financiar la inmigración de los judíos de Marruecos y continuó estableciendo nuevas poblaciones en el país. Después de la Guerra de los Seis Días en 1967, se proclamó otra Campaña de Emergencia durante la cual se recaudó la cifra récord de 150 millones de dólares. Entre las iniciativas más inusuales de la organización durante este período se puede mencionar la gira por Europa y América del Sur realizada por la orquesta juvenil de la Gadna (un programa premilitar para los jóvenes), actuando conjuntamente con el artista estadounidense Danny Kaye frente a pletóricas audiencias. Durante este mismo período, la difícil situación de los judíos en la Unión Soviética surgió como un asunto prioritario a ser tratado por el Pueblo Judío en todo el mundo.
(Foto de David Rubinger).
“Un capítulo especial, aún en consideración con su propia y extraordinaria historia, lo escribió Keren Hayesod en la Guerra de los Seis Días. Fue la proclamación de la Campaña de Emergencia, cuya dimensión no tuvo precedentes. La epopeya de esta campaña aún no se ha escrito, pero el recuerdo de aquellos días en los que tuve el privilegio de participar permanecerá por mucho tiempo. La escritura de esa historia es más adecuada para los poetas que para los historiadores”.
Keren Hayesod focalizó sus actividades durante esta época en dos tareas de suma importancia nacional. El primero, se refiere a la ola masiva de inmigración al país después de la Guerra de los Seis Días. Solo entre 1971 y 1974 llegaron unos 185.000 inmigrantes, aproximadamente la mitad de ellos provenientes de la Unión Soviética. El resurgimiento de la aliá en gran escala creó necesidades especiales y Keren Hayesod se movilizó para solventar este importante desafío nacional. Después del estallido de la Guerra de Yom Kipur en 1973, Keren Hayesod lanzó una Campaña de Emergencia que recaudó más de 300 millones de dólares, superando la cifra récord recaudada en 1967. La segunda gran tarea nacional fue el Proyecto Renovación, un programa de rehabilitación de vecindarios desaventajados, programa en el cual Keren Hayesod desempeñó un papel preponderante. A partir de 1978, Keren Hayesod instauró el programa de hermandad de poblaciones y vecindarios de Israel con comunidades de todas partes del mundo, creando una dinámica de relaciones directas entre las comunidades hermanadas, algunas de las cuales aún existen. Keren Hayesod implementó cambios organizativos importantes durante este período, que incluyeron la creación de la División Femenina Internacional y del Departamento de Liderazgo Joven.
“Cuanto que los judíos hicieron por Keren Hayesod, más es lo que él hizo por ellos.
Keren Hayesod les brindó tanto el desafío por asumir, como el medio para participar en la redacción del capítulo más importante en diecinueve décadas de historia judía: la construcción del Estado de Israel”.
Esta década comenzó con la Primera Guerra del Líbano. Nadie podría haberse imaginado que terminaría con el colapso del imperio soviético. La profunda crisis económica que afectó a Israel en el bienio 1983 – 1984 creó grandes dificultades para la población del país. Los programas para aliviar la angustia social se convirtieron en la prioridad máxima de Keren Hayesod. Además, apoyó la Operación Moisés, que trasladó a unos 5.000 nuevos inmigrantes desde Etiopía a Israel, durante un espectacular puente aéreo llevado a cabo en 1984. La entidad se movilizó de inmediato para recaudar fondos que permitan responder a las necesidades especiales de los nuevos inmigrantes. Israel estaba aún en medio de la Primera Intifada (1987 – 1993), cuando la Unión Soviética abrió las puertas a más de un millón de judíos que habían luchado durante años por el derecho de emigrar a su patria ancestral. Esta inmigración masiva cambió de manera radical el curso de la historia del Estado de Israel y de Keren Hayesod.
“La masiva inmigración de los judíos de la ex Unión Soviética cambió radicalmente el curso de la historia del Estado de Israel y de Keren Hayesod”.
Esta década dramática comenzó con dos eventos históricos: el colapso final de la Unión Soviética por un lado y la Guerra del Golfo contra Irak en el otro. El fin del régimen comunista en la URSS en 1989, hizo posible que los judíos pudiesen emigrar libremente a Israel. Además, en 1991, más de 14.000 judíos etíopes fueron trasladados en vuelos especiales a Israel durante la Operación Salomón. El enorme número de nuevos inmigrantes creó una gran demanda de servicios, viviendas y lugares de trabajo para los recién llegados. Keren Hayesod lanzó una campaña especial, Éxodo, que recaudó más de 500 millones de dólares para este propósito durante los años 1991 y 1992. El proceso de Oslo en 1993, le permitió a Keren Hayesod organizar eventos impensables hasta entonces, como una gira en 1994 por Jordania en la que tomaron parte los participantes de la Conferencia Mundial Anual, que incluyó una reunión con el Rey Hussein. Al año siguiente, en 1995, Keren Hayesod patrocinó una misión a Marruecos. El año terminaría trágicamente con el asesinato del Primer Ministro Itzjak Rabín, provocando una conmoción general en la población del país. Con motivo del 50° aniversario del Estado de Israel, en 1998, Keren Hayesod estableció el Premio Yakir Keren Hayesod con el propósito de reconocer a destacados líderes y contribuyentes. Ese mismo año, los participantes en la Conferencia Mundial recorrieron los campos de detención en Chipre, donde los británicos concentraban a los judíos que intentaban llegar ilegalmente a Eretz Israel, antes de la declaración de la independencia del estado. Alrededor de un millón de judíos inmigraron a Israel durante esta década, incluyendo a 900.000 provenientes de la ex Unión Soviética.
”Keren Hayesod y todos los que la lideran y la apoyan, han jugado desde el principio un papel crucial en esta gran saga moderna del Pueblo Judío, y ustedes tienen una gran parte en nuestra satisfacción y nuestro orgullo actuales”.
En el año 2000 Keren Hayesod celebró su 80° aniversario con un magnífico evento en el Monte de los Olivos en Jerusalén. Para conmemorar dicha ocasión se estableció un nuevo premio otorgado por Keren Hayesod, el Premio Nadiv. La ola de terror desencadenada durante la Segunda Intifada, de 2000 a 2004, tuvo un impacto devastador en la economía israelí, lo que provocó una gran angustia social. La situación se vio agravada por la crisis de la industria turística y el estallido de la burbuja de la alta tecnología. En respuesta, Keren Hayesod llevó a cabo proyectos sociales de amplio alcance a los que otorgó máxima prioridad, junto a sus áreas tradicionales de actividad, como son la absorción de los nuevos inmigrantes y la educación judeo-sionista en la Diáspora. Así, por ejemplo, Keren Hayesod en asociación con la Agencia Judía para Israel, las compañías Cisco Systems Inc. y Appleseeds Academy, lanzó el proyecto Net@, que desarrolla un programa de alta tecnología destinado a los jóvenes de la periferia social y geográfica de Israel. Keren Hayesod fue también socio principal del Fondo para las Víctimas del Terror implantado por la Agencia Judía para Israel. Durante este período, Keren Hayesod intensificó enormemente sus actividades entre el público no judío, a través de su asociación con la organización Fraternidad Internacional de Cristianos y Judíos, encabezada por el Rabino Yejiel Eckstein, creando un nuevo departamento, Amigos de Israel. En 2010, cuando Keren Hayesod celebró su 90° aniversario, dirigió sus esfuerzos a abordar las necesidades de la periferia israelí, a fin de cerrar la brecha social, convirtiendo este objetivo en uno de los principales focos de su trabajo.
“Dudo que alguna otra organización similar pudiera surgir en otros pueblos del mundo y que sea tan creativa y tan participativa en una misión tan singular como el renacimiento de una nación. Esto se debe a que Keren Hayesod jugó un papel central en la unión del pueblo y un papel vital en la movilización de recursos para crear algo de la nada”.
La segunda década del Siglo XXI comenzó con la reafirmación del histórico acuerdo de cooperación entre el Gobierno de Israel y Keren Hayesod, a fin de promover los objetivos estratégicos del país: fortalecer la sociedad israelí, particularmente en la periferia; facilitar la aliá y la absorción y profundizar la educación judía en la Diáspora. En 2011, Keren Hayesod se convirtió en una empresa de beneficio público.
Durante los últimos diez años, los contribuyentes de Keren Hayesod se movilizaron en diversas oportunidades para brindar asistencia en circunstancias de emergencia y de crisis humanitaria: el devastador incendio en el Monte Carmel (2011); durante y después de las Operaciones “Pilar de Defensa” (2012) y “Cúpula Protectora” (2014), ambas lanzadas en respuesta a las intensos ataques lanzados por el Hamás en el sur. Keren Hayesod brindó ayuda también a la comunidad judía de Grecia a raíz de la crisis económica de ese país (2012). Keren Hayesod proporciona su permanente apoyo a las comunidades fronterizas de la Franja de Gaza, que sufren pérdidas humanas y materiales debido a los continuos ataques terroristas.
Esta década fue testigo del resurgimiento de un cruel antisemitismo en todo el mundo: ataques terroristas contra judíos y comunidades judías, intentos de demonizar al estado judío y boicotearlo económicamente. El clima hostil en varios países generó un aumento dramático en la aliá a partir del año 2015, particularmente de Francia, Ucrania y Rusia, a la vez que se reanudó la aliá proveniente de Etiopía. Por primera vez en más de 2000 años, el número de judíos en Eretz Israel superó el número de judíos de la Diáspora. La organización Cristianos Amigos de Israel se ha convertido en un factor importante en los esfuerzos de recaudación de fondos y divulgación de Keren Hayesod. En julio de 2020, Keren Hayesod celebró su centenario.
“Sin Keren Hayesod no existiría el Estado de Israel”.
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