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En Reconocimiento: Frank Lowy AC

Receptor del Premio Nadiv Keren Hayesod 2013

Sídney, Australia

Los participantes del evento de clausura de la Conferencia Mundial Anual de Keren Hayesod, llevada a cabo en Jerusalén el 20 de junio de 2013, contando con la presencia del entonces Presidente del Estado de Israel, el Sr. Shimón Peres, fueron testigos de un hecho no muy común y a la vez conmovedor: la entrega del Premio Nadiv Keren Hayesod a Frank Lowy AC, uno de los líderes judíos más destacados de nuestro tiempo.

Frank Lowy

Shimón Peres, z”l y Frank Lowy AC.

Un hombre de negocios internacionalmente conocido por su filantropía, Frank Lowy cree que el regalo más apreciado que puede dar es su tiempo. Si bien es relativamente fácil emitir un cheque, la participación requiere un esfuerzo mayor. Hace ambas cosas, pero siempre lo hace con pautas claras en mente. Las contribuciones de Frank son estudiadas cuidadosamente y dirigidas solo a aquellos lugares en los cuales él cree que puede hacer la diferencia. Aunque puede dar espontáneamente, no da sin pensar.

Durante décadas, Frank, su esposa Shirley y su familia han contribuido a la investigación médica, a la educación y a los sectores desfavorecidos en Australia. El nombre Lowy resalta en una variedad de edificios, incluyendo un Instituto del Cáncer, un Instituto del Corazón y el Instituto Lowy, que reúne a un grupo de expertos en asuntos exteriores del país.

La Sinagoga Hugo Lowy en Sídney, construida en memoria de su padre, es un lugar de gran significado para la familia. De hecho, el mundo judío es el foco principal de su filantropía. Durante muchos años Frank fue Presidente de Keren Hayesod en Australia. Anteriormente, fue Presidente de la Campaña Judía Comunitaria. La familia continúa siendo la principal contribuyente en Australia a ambas organizaciones. También es un gran contribuyente en California, EE. UU.

Especialmente importante para Frank es la contribución que hizo y que permitió la construcción del Museo de la Brigada Golani de las FDI, ubicado en las cercanías del cruce Golani. Él mismo sirvió en Golani durante la Guerra de la Independencia.

En general, Frank ha direccionados sus contribuciones a través de Keren Hayesod. Recientemente, un fondo privado llamado Fondo de Caridad Paamei Tikvá, creado gracias a una decisión de Frank, ha contribuido con extraordinaria generosidad a la educación, a la medicina, a la investigación médica, a estudios estratégicos y a una variedad de organizaciones benéficas a través de todo el país.

Una reciente contribución del fondo ha permitido la renovación y restauración de la sala de conciertos de la Orquesta Filarmónica de Israel en Tel Aviv. Esta contribución también financiará un programa que brinda la oportunidad de aprender conceptos básicos de la música clásica a más de 25.000 niños y jóvenes.

Frank tenía solo 13 años cuando los acontecimientos derivados del Holocausto lo obligaron a dejar la escuela. Actualmente, disfruta realmente de su rol como Presidente del Instituto de Estudios de Seguridad Nacional, un grupo de expertos en la materia con sede en Tel Aviv. Le fueron concedidos dos Doctorados Honoris Causa: uno por la Universidad de Tel Aviv y otro por la Universidad de Nueva Gales del Sur en Australia.

En el año 2000 fue galardonado con el más alto honor civil que se concede en Australia: Compañero de la Orden de Australia, AC, por su contribución a los negocios y a la filantropía. En 2008, fue honrado, en homenaje a su acción filantrópica, con la emisión de un sello postal australiano que lleva su foto.

Frank le adjudica gran importancia al servicio público, razón por la que se desempeñó como miembro de la Junta del Banco de la Reserva de Australia (el Banco Central), durante diez años. También durante diez años fue el Presidente de la Galería de Arte del Estado y está en su décimo año como Presidente de la Federación de Fútbol de Australia, donde se le atribuye el resurgimiento exitoso del fútbol como deporte profesional.

Nacido en el seno de una modesta familia en Checoslovaquia en 1930, Frank pasó los últimos años de la Segunda Guerra Mundial en Budapest, Hungría. A la edad de 15 años partió a la entonces Palestina por intermedio de la Aliá Bet (aliá ilegal), a donde llegó después de una corta estadía en Chipre.

Mientras vivió en Israel, los sobrevivientes de su familia emigraron de Europa a Australia. Anhelaba reunirse con ellos y, después de seis años de separación, partió en dirección a Sídney en 1952.

Allí, se casó con Shirley Rusanow y tienen tres hijos: David, Peter y Steven, cuyas familias comparten el mismo compromiso con la filantropía y con el Estado de Israel.

Frank Lowy

De izq. a der.: Yohanna Arbib-Perugia, Presidenta de la Junta Mundial de Fideicomisarios de KH; Shimón Peres, z”l, Presidente del Estado de Israel; Frank Lowy AC; Eliezer (Moodi) Sandberg, Presidente Mundial de KH; Julia Koschitzky, Presidenta Honoraria de KH y Greg Masel, Director General de KH.

Mensaje personal de Frank Lowy AC a Keren Hayesod

El honor que me ha concedido Keren Hayesod esta noche es muy significativo para mí. Se hace eco de la filosofía de mis padres que, en sus modestas circunstancias, practicaron la tradición judía de compartir y asumir la responsabilidad colectiva.

Keren Hayesod encarna esta tradición, y después de estar asociado con la organización durante medio siglo y liderarla en Australia durante muchos años, aprecio la importancia del trabajo que hace para la aliá y la absorción.

Pero sé también que hace algo más profundo. Fortalece los lazos en el mundo judío al proporcionarnos a nosotros en la Diáspora una plataforma por la cual podemos asociarnos al Estado de Israel.

Mientras los hombres, mujeres y niños de Israel arriesgan sus vidas permanentemente, Keren Hayesod nos proporciona los medios para posibilitar nuestra participación tanto espiritual como materialmente.

Por desequilibrado que esto pareciera ser, mantener esta preciosa asociación es crucial tanto para la Diáspora como para Israel.

Keren Hayesod crea el entorno de una familia global. Al brindarnos el marco de poder participar y cumplir con nuestras obligaciones mutuas, enriquece nuestras vidas y logra unirnos aún más.

La familia mundial de Keren Hayesod desea expresar su profunda gratitud y aprecio a Frank Lowy AC por décadas de generosidad desinteresada, liderazgo inspirador y compromiso ilimitado. Frank encarna los valores más elevados de Keren Hayesod y le deseamos muchos años más de activismo, salud y felicidad junto a sus seres queridos.