En 1921, un año después de su creación, Keren Hayesod lanzó una campaña mundial para alentar a los judíos a sentirse más cerca de Eretz Israel y contribuir, en la medida de sus posibilidades, a la causa sionista. Reacciones sorprendentes y conmovedoras llegaron de todo el mundo, de maneras completamente inesperadas.
En Viena, por ejemplo, estudiantes judíos anunciaron que ayunarían un día a la semana y donarían a Keren Hayesod el dinero diario que ahorrarían en alimentos. En 1923, Keren Hayesod se esforzó especialmente para llegar a pueblos pequeños y apartados de las grandes ciudades. Leib Yaffe, un importante representante de Keren Hayesod en la década de 1920 y luego director ejecutivo de la organización, se sorprendió por las conmovedoras contribuciones de judíos residentes en América del Sur. La mayoría de ellos eran muy pobres e incapaces de donar dinero, pero encontraron formas inesperadas de contribuir a los esfuerzos de Keren Hayesod. Se han encontrado registros de donaciones de 50 pollos, sacos de lino y granos diversos. Otras familias optaron por vender joyas u objetos preciosos, y en una fiesta en un pequeño pueblo, los residentes incluso imprimieron una fotografía de Leib Yaffe y la vendieron a los invitados. En 1936, la pequeña comunidad Judía de Chile recolectó 20 toneladas de café, que se vendieron a $ 5,000 en beneficio de Keren Hayesod.
En la Tierra de Israel, los contribuyentes también encontraron formas originales de contribuir por su parte a la campaña, ya sea en forma de días de trabajo donados a Keren Hayesod, kilogramos de cebada, parcelas de tierra, pertenencias personales, y otras.
El fenómeno continuó incluso después del establecimiento del Estado. Después de la Guerra de los Seis Días, hubo informes sorprendentes de orfanatos donde los niños decidieron donar su dinero de bolsillo destinado a ir al cine, y de maestros que donaban sus salarios mensuales. E incluso hoy, como parte del proyecto Bar / Bat Mitzvah, niños judíos de todo el mundo eligen donar parte de los regalos que reciben a Keren Hayesod. Desde su creación y hasta la fecha, Keren Hayesod ha seguido alentando a personas de todo el mundo a contribuir a su manera con la causa sionista, valorando cada contribución, sea grande o pequeña.