Para garantizar a los nuevos olim un “aterrizaje suave” al país después del largo viaje en barco o avión, en diciembre de 1967, se inauguró el primer Centro de Absorción en la ciudad de Arad, no lejos de las pintorescas montañas de Sodoma. Si bien los Ulpanim de enseñanza del idioma hebreo ya existían, las oleadas masivas de inmigración posteriores a la Guerra de los Seis Días, requerían una reorganización del proceso de absorción existente. En dos años, se establecieron otros 12 nuevos Centros de Absorción en Haifa, Ashdod, Carmiel y otros lugares del país. En su apogeo, funcionaron 50 Centros de Absorción en Israel. Hoy, con la asistencia del Keren Hayesod y la Agencia Judía, operan 23 Centros de Absorción en todo Israel, en cuyas dependencias los nuevos inmigrantes gozan de una vivienda temporaria, aprenden hebreo, reciben asesoramiento, capacitación laboral y adquieren gradualmente las herramientas necesarias para una efectiva integración en el tejido social israelí.
Los nuevos inmigrantes que eligen no instalarse en Centros de Absorción tienen la opción de utilizar paquetes alternativos con varios beneficios y posibilidades de facilitar su integración. Desde el establecimiento del Estado de Israel, el Keren Hayesod ha ayudado a más de 3 millones de judíos a concretar su aliá. Un tercio de ellos ha utilizado los servicios de transición ofrecidos por estos centros. Nada mal para 50 años…