En agosto de 1956, después de que Marruecos declarara su Independencia y muchos judíos enfrentaran un claro peligro, el Gobierno de Israel, junto con el Consejo General Sionista, aprobaron una resolución de emergencia destinada a ayudar a los judíos de Norte de África en general y a los de Marruecos en particular. El Keren Hayesod estableció rápidamente una Campaña especial, y las ruedas de la inmigración clandestina desde Marruecos comenzaron a activarse. A ese efecto los emisarios encubiertos enviados a ese país establecieron una organización clandestina denominada «HaMisgueret», la que trabajó intensamente para rescatar a los judíos de Marruecos y trasladarlos a Israel lo más rápido posible. Era un trabajo peligroso, en el que cualquiera que fuera atrapado era torturado, a veces hasta la muerte. La gran cantidad de dinero recaudada durante la Campaña especial, unos US$ 25 millones, sumada a lo recaudado en las campañas regulares, se utilizó no sólo para rescatar a los judíos de Marruecos sino además para preparar su absorción en Israel. Entre 1956 y 1961, varios miles de judíos fueron rescatados. En 1961, los esfuerzos para lograr la aliá masiva de los judíos marroquíes a Israel tuvieron un inesperado y enorme éxito como consecuencia de la firma de un acuerdo con el nuevo rey, Hassan II. A los cuatro años de la operación inicial, más de 100,000 olim llegaron procedentes de Marruecos a Israel y fueron integrados al jóven Estado Judío.
Algunos de los esfuerzos de la aliá masiva de estos años implicaron visitas de representantes de la Agencia Judía a aldeas y pueblos remotos en las legendarias montañas del Atlas marroquí. En el video adjunto, vemos la llegada de estos representantes a una remota y aislada aldea judía del Atlas, al final de la cual todos los judíos empacan sus escasas pertenencias y emprenden el viaje a Israel, acompañados por los representantes sionistas.